Marketing
Durante décadas se nos ha dicho que para vender debemos crear una necesidad en el potencial cliente, aumentar sus miedos y generarle ansiedad para que busquen el producto. Tal vez esto funcionó en años anteriores, pero ahora la estrategia de marketing digital ha evolucionado; se ha demostrado que el placer vende más que el miedo.
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En la era de la información y la tecnología, cuando el ser humano se ha adaptado a elegir entre incontables opciones, nadie quiere que le intimiden. Está comprobado que el cerebro rechaza las amenazas, huye de los miedos, se conecta con el placer, busca satisfacción. Es por ello que la estrategia de Marketing efectiva se enfoca en hacer feliz al cliente; ofrece felicidad y no miedo o necesidad.
Una estrategia de marketing exitosa indaga cuáles son los miedos del comprador, pero no para amedrentar, sino para aportar soluciones. Pare venderle placer y felicidad. ¿Temen estar incomunicados? “Aquí, el mejor teléfono, con las mejores aplicaciones y la tecnología que te mantendrá siempre en línea”. ¿Temen sanciones contables? ¡Ofrece el servicio más eficiente en el área¡
Actualmente las soluciones, simplicidad, comodidad, confort, inmediatez y accesibilidad es lo que busca el ser humano. Cada vez menos complicaciones. Es el cliente, no tú.
Esto implica para el vendedor un trabajo adicional. No es crear el miedo, sino conocer la verdadera necesidad y buscar la solución para el cliente. “Tengo lo mejor para ti, lo que te hace feliz”, es el mensaje que atrapa al público meta, independientemente de su edad.
¿Cómo Aplicar esta estrategia de marketing?
Esta sencilla fórmula aplica para todo, no obstante debe ser usada con cuidado, porque de no cumplir lo que se ofrece, se perderá la credibilidad y el fracaso será inevitable. Así que, si quiere mejorar la captación del público siga los pasos:
1.- Conocer el mercado, buscar la necesidad
El hecho de saber que no vas a vender con el enfoque en la necesidad del cliente, no quiere decir que pierdas interés en ello. Mientras conozcas mejor los temores del comprador, más acertada será la venta porque podrás disminuir esa carencia.
2.- Ofrecer la mejor solución, el placer inmediato (de ser posible)
Es decir, el enfoque está en la salida que se ofrece al consumidor. Se hace imperativo conocer el mercado, el producto o servicio y a quién se quiere vender. Indagar, estudiar, analizar y accionar con el mayor conocimiento, es lo que suma garantía a nuestra estrategia.
3.- Mantener el seguimiento o interacción con el target.
Sus necesidades o gustos pueden cambiar drásticamente. Al estar conectados con el comportamiento del consumidor, se podrán realizar los ajustes necesarios.
Si ya lo aplicabas, felicitaciones! En caso contrario, manos a la obra.
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