El poder de la música sobre la experiencia en las compras

El poder de la música
La música tiene un impacto en el ánimo y en el comportamiento de los consumidores.

Puede impactar en el ánimo y comportamiento del consumidor

Una mala canción puede hacer que nos sintamos cómodos comprando o que simplemente huyamos de la tienda. Así es el poder de la música, parte crucial en la estrategia de posicionamiento del retail.

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Sirve para señalar con que público quieren conectar y mostrarle que los comprenden perfectamente. También trasmite valores de marca y señas de identidad sin mucho esfuerzo, además de impactar en el ánimo de los consumidores.

La música tiene un impacto en el ánimo y en el comportamiento de los consumidores. Sin embargo, también puede convertirse en un lastre sino se utiliza con eficiencia.

Según un estudio de Cloud Cover Music, partiendo de una base de muestra estadunidense, la actitud de los consumidores hacia una tienda o marca puede cambiar de acuerdo a la música a la que se expongan. Existen géneros que hacen que la reacción sea diferente pero el volumen puede hacer que varíe.

El poder de la música y un sonido que puede ser o no molesto

54% de los consumidores llegaron a abandonar una tienda porque la música estaba demasiado alta. Sin embargo, tampoco es ideal una tienda en silencio. Solo 30% de los consumidores creen que es preferible una tienda sin música.

Del lado contrario esta un 36% que considera que es mucho peor. Entender que los sonidos pueden impactar en cómo nos sentimos y en que los consumidores tienen un umbral claro entre lo que es o no es molesto, es muy importante.

El poder de la música
Existen géneros que hacen que la reacción sea diferente pero el volumen puede hacer que varíe.

En estos momentos la neurociencia está analizando porque algunos sonidos resultan muy molestos para unas personas y no para otras. Los neurólogos  lo bautizaron como misofonía  y han comprendido que se debe a que el cerebro de estas personas con estas características funciona de una manera distinta.

Con esto, las marcas y las empresas deben comprender que el sonido no es un elemento al azar. Es importante que sea cuidado y medido dentro de la estrategia. Asimismo, comprender qué sonidos son los que mejor funcionan con sus audiencias.

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